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La Ley de Atención a la Clientela seguirá su curso hacia el BOE sin incorporar cambios en la Ley 13/2011 de regulación del juego. En el cierre del trámite parlamentario, el Congreso ha respaldado que el paquete de medidas sobre juego online no se integre en esta norma, después de que el Senado lo retirara del texto.
Qué quería cambiar el Gobierno con esta reforma
La intención era aprovechar la tramitación de la Ley de Atención a la Clientela para introducir, mediante una disposición final, una revisión relevante del marco del juego. Ese bloque apuntaba a aspectos clave del juego online: recortar el uso de incentivos para atraer a nuevos usuarios, estrechar el margen de la publicidad y reforzar controles vinculados a medios de pago y medidas de protección de menores.
El Gobierno pretendía retocar de forma relevante el marco actual, tocando cuestiones especialmente sensibles del juego online, como:
- El uso de promociones para atraer a nuevos clientes
- Nuevas restricciones sobre publicidad
- Ajustes sobre controles vinculados a medios de pago
- Medidas reforzadas de protección de menores
Cómo se ha tumbado el bloque del juego
En la fase del Senado, el contenido relativo al juego se eliminó por completo. Al volver al Congreso, la decisión final ha sido no reintroducirlo, a pesar de que desde el entorno del Gobierno se defendía mantenerlo dentro de la ley.
En la votación, la supresión se sostuvo con el apoyo de PP y Vox, junto con otros respaldos adicionales. En el lado contrario, los grupos del Gobierno y varios partidos de distinto signo se posicionaron para que la reforma del juego se mantuviera: por ejemplo, PSOE y Sumar defendieron conservar el bloque, y también hubo rechazo a la eliminación por parte de formaciones como ERC o el PNV, entre otras.
Qué implica a partir de ahora
La norma sí endurece obligaciones de atención al cliente para actividades como energía, telecomunicaciones, banca o plataformas audiovisuales, pero el juego seguirá operando bajo el marco actual: Ley 13/2011 y su normativa vigente.
Si más adelante se quiere legislar sobre publicidad, promociones, captación de jugadores, medios de pago o medidas de protección de menores, ya no será dentro de este texto: deberá tramitarse en una iniciativa específica o en una reforma directa de la propia Ley del Juego.
